Pedro Jara Carrillo nace en Alcantarilla el 11 de diciembre de 1876, en la calle Alta (hoy Jara Carrillo). Fueron sus padres Francisco Jara y Teresa Carrillo, y fue bautizado en la iglesia parroquial de San Pedro Apóstol el día siguiente a su nacimiento por el cura párroco Miguel Valdivieso y García. Sus padrinos fueron Santiago Jara y su esposa Josefa López, y actuaron como testigos Juan Hernández, sacristán de la parroquia, y Francisco Martínez Ruiz, monaguillo, los dos naturales de Alcantarilla.

Hasta hace poco existía una confusión sobre su fecha de nacimiento, ya que se creyó que fue el 11 de noviembre de 1878. Pero consultados los archivos parroquiales de la iglesia de San Pedro se atestigua fielmente que la fecha de nacimiento es la indicada al principio del escrito. Hasta tal punto existió el error, que las autoridades murcianas, a instancias del cronista de la ciudad Carlos Valcárcel Mayor y con el apoyo del desaparecido diario Línea y de Radio Murcia, le tributaron un gran homenaje al cumplirse el primer centenario de su nacimiento, es decir, el 11 de noviembre de 1978. El homenaje consistió, entre otros actos, en depositar una corona de laurel en el monumento a Jara Carrillo existente en el jardín de Floridablanca y la lectura de poemas de sus libros más importantes. Felizmente, hace años quedó aclarado tal error.
Su infancia y adolescencia transcurren en su Alcantarilla natal hasta que a los quince años se traslada a Murcia para estudiar Magisterio. Colabora en diversos diarios murcianos hasta que en 1902 es nombrado director del Correo de Levante. En 1911 pasa al prestigioso diario El Liberal, del que será su director hasta su fallecimiento. Este diario cambiaría en 1939 su rotativa por el prestigioso y murcianísimo diario Línea, también desaparecido a mediados de la década de los 80 del pasado siglo. Al tesón de Jara Carrillo, Murcia debe la creación de su Universidad, el Conservatorio Superior de Música, las Escuelas Graduadas, la canalización de las aguas del Taibilla, la guarnición en la ciudad del Regimiento de Artillería (en el antiguo cuartel de la calle Cartagena), etc. Jara Carrillo, como lo sería a nivel nacional Joaquín Costa, es un regeneracionista y no se cansa de reivindicar para su Murcia una mejora en el bienestar social y económico de la casi olvidada provincia por parte del gobierno central. Sería concejal del Ayuntamiento de Murcia entre 1920 y 1923, consiguiendo el embellecimiento de la ciudad. Muere en su casa del paseo del Malecón el día 4 de octubre de 1927 a la temprana edad de 51 años

Más tarde, el Ayuntamiento de Murcia le dedicó un monumento en el jardín de Floridablanca. El ilustre José Francés escribía: «El 4 de octubre de 1927, Murcia quedó viuda». También el escritor y periodista José Ballester expresó el sentimiento por la muerte de Jara Carrillo en sentidas estrofas. El Ayuntamiento de Alcantarilla le dedicaría la calle que le vio nacer y posteriormente, el 18 de julio de 1963, siendo alcalde de la villa Diego Riquelme Rodríguez, se inauguró la plaza que lleva su nombre, con un busto en el centro de la misma obra del escultor José Planes Peñalver (hijo), un precioso trabajo realizado en bronce. Años más tarde, el mismo escultor también realizaría el busto de Sebastián Lorente Ibáñez, el Sabio Lorente, esta vez en mármol de Macael (Almería). También por esas fechas se coloca su retrato en el Consistorio, en la Galería de Hijos Ilustres de Alcantarilla (en la actualidad, los retratos de la Galería se encuentran en el despacho del alcalde de la villa). Igualmente, un colegio público de enseñanza Primaria lleva el nombre de Jara Carrillo.

En 1984, el Ayuntamiento de Alcantarilla instituyó el Certamen Internacional de Literatura Premios Jara Carrillo y en 1991, siendo alcalde Pedro Manuel Toledo Valero se publicó el libro ‘Pedro Jara Carrillo, Verso y Prosa’, cuyo autor es Manuel Llanos de los Reyes, doctor en Filosofía y Letras por la Universidad de Murcia y que realizó su tesis doctoral sobre Pedro Jara Carrillo. Entre la obra del autor destacan los poemarios ‘Siemprevivas’, ‘Relámpagos’, ‘Gérmenes’, ‘Libro de las Canciones’, ‘El aroma del arca’, etc.

Pero serían sus himnos los que le han dado fama en toda Murcia, destacando el ‘Himno a los exploradores murcianos’, ‘Himno a Murcia’, escrito en 1922, y finalmente el ‘Himno a la Virgen de la Fuensanta’, escrito con motivo de la solemne coronación canónica de nuestra Patrona en abril de 1927, y que comienza con los preciosos versos «Virgen de la Vega / Reina del Grandioso /milagro de flores». En sus himnos, Jara Carrillo demuestra el gran cariño que sentía por Murcia y su huerta. Entre sus cuentos están ‘El maquinista’, ‘Con oro nada hay que falle’, ‘La gitana’, etc. Tiene una preciosa novela, ‘Las caracolas’, y dos obras de teatro, ‘Un telegrama’ y ‘Del retablo mariano’, representado en el teatro Romea con motivo de la coronación de la Patrona de Murcia en 1927.
Colegio público Jara Carrillo

Sería interminable citar los artículos periodísticos de este gran murciano nacido en Alcantarilla, y de quien recientemente se ha colocado un busto en la plaza que lleva su nombre en nuestra villa.

Fulgencio Sánchez Riquelme
Cronista Oficial de Alcantarilla