Desde principios del siglo XIX tenemos constancia de la exportación de fruta y hortalizas de la huerta murciana hacia otros puntos nacionales e incluso internacionales, debido al excedente de estos productos, además deriva en una primera conserva artesanal realizada por las propias mujeres de la huerta.
La industria conservera, de gran importancia en la Región de Murcia, también se dejó ver en Alcantarilla, siendo un significativo medio de trabajo.
Algunas de las chimeneas, que aún quedan en pie, son testigo de ese auge industrial y fueron una importante fuente de ingresos para la ciudad