Desde su construcción y hasta ahora no ha parado de elevar el agua de la acequia Alquibla, Mayor o Barreras, introduciéndola en sus 72 cangilones que presenta en sus dos coronas circulares, de 11 metros de diámetro, con la finalidad de depositarla en la cumbrera del acueducto que forma parte de este complejo sistema hidráulico.
Anterior a su instalación se utilizaban otros sistemas de ingenios hídricos más simples para poder elevar el agua, pero resultaban ser menos efectivos.
La primera noria fue de madera, pero el continuo contacto con el agua las deterioraba frecuentemente. En el siglo XIX comenzaron a introducirse las de hierro, resultando ser más resistentes y duraderas.
El conjunto noria, museo y acueducto están declarados Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento.
¿Sabías que la palabra noria proviene de Na’ura? significa “la que llora”, el batido constante del agua sobre las paletas, y su desplazamiento con los cangilones cargados produce ese repetido llanto implícito en su nombre.